la vida, las cosas y las personas.
Cuando te cambia el carácter es que algo te pasa. Si ya no sonríes es que algo te ocurre. Puede que te suceda por cómo te tomas la vida, la forma de entender las cosas y de relacionarte con la gente.
Te levantas de buen humor porque, en teoría, tienes salud, económicamente estás bien y encima con tiempo libre para poder disfrutarlo y sin embargo alguién o algo te pone la primera zancadilla o eres tú ¡que te lo tomas así!
¡Vale! ¡Bueno! no pasa nada. Sigamos con lo planeado, digamos que ir a ver la película planteada inicialmente, pero el cómo te sientes no lo puedes aparcar. Y claro, te pasas toda la película sin ganas, sin disfrutarla aunque sea buena y lo peor, saliendo mal del cine.
Con esto quiero decir, y eso que siempre busco el lado bueno, que no hay que forzar 'tanto' las cosas cuando ya están torcidas. Muchas veces es bueno darse un respiro y buscar de nuevo el equilibrio. Sea éste provocado o que lo has roto tu mismo.
¡ Desconecta! Rompe con la rutina y en este ejemplo lo mejor es no ir a ver la película por mucho que te hayas comprometido. Tanto por los demás porque les puedes fastidiar el día y sobre todo por ti.
La estrategia es saber qué hacer cuando no se puede hacer nada.
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