Vete de dónde los héroes son señalados como traidores

lunes, 22 de diciembre de 2008

Sí al conocimiento

Supongamos que eres el camarero de un restaurante (que funciona bien y puede funcionar mejor), y que por las noches vas a clases de marketing. Tú jefe podría aceptar tu decisión con un: ¡bueno! pero seguramente no te incluiría en los planes a largo plazo para el equipo de marketing. Cuando tenga que asignar un puesto superior vacante, puedes apostar que no estarás ni siquiera cerca del principio de la lista, y quizá podrías estarlo cuando haya que llevar a cabo un despido. Él sabe que podrías irte en cualquier momento que quisieras y que tu posibilidades de marcharte significan que no se puede confiar en ti.
Muchas personas inconscientemente dejan de invertir tiempo en ampliar sus conocimientos ( y no me refiero sólo a la formación reglada porque, hoy en día, el conocomiento está en internet, blogs, la gente de tu entorno, conferencias, cursos,...) pero actuan racionalmente porque ven que: 'para que voy a ampliar mis conocimientos profesionales...' Y entran en un circulo del que no es posible salir. Sobretodo ocurre con los adolescentes y jovenes de las clases más desfavorecidas: de la educación hablaré otro día.
¡Sí al conocimiento! por infinitas razones: te mejora como persona, permite ampliar las relaciones con otras personas, puedes compartilo con los demás y muchas más. Seguro que puedes aportar algunas.
¿Le dirías a un empresario (o a tu superior directo) que te estás formando para adquirir los conocimientos que te permitan desarrollarte profesionalmente y cambiar a un puesto superior?

martes, 16 de diciembre de 2008

Tiempo y esfuerzo

Las personas establecemos una serie de jerarquías tanto a nivel de actividades como a nivel de relaciones con las personas y con cualquier cosa, muchas veces inconscientemente.
En la oficina, o lugar de trabajo, el tiempo viene definido de antemano por un horario que marca la empresa ( e incluso hoy en día se obliga a fichar en muchas de ellas. Y consecuentemente la gente se ciñe a dicho horario, lo cuál no implica que se obtengan mejores resultados; generalmente peores). En cuanto al esfuerzo son las personas, no la empresa, quienes lo definen (y no me refiero sólo al esfuerzo físico).
Por esto mismo a la hora de realizar una actividad ni todos son iguales ni lo hacen de la misma forma. Por ejemplo, se recibe material de oficina (rotuladores, boligrafos, clips, papel,...) a las siete de la tarde (horario de salida) y que se debe guardar en un armario habilitado para ello. Supongamos que no hay una persona encargada para ello (aunque así fuera se encontraría con la misma circunstancia y decisión) y, que son diez personas: la directora, el subdirector, una jefa comercial, dos comerciales, tres administrativos, una financiera-contable, un responsable de marketing y el recepcionista. ¿ Quién recoge y ordena en el armario dicho material?
Las alternativas son variadas aún así la mayoría de las personas contestan que...el recepcionista. ¿Por qué si el tiempo (media hora) y el esfuerzo (recoger, ordenar, cerrar la oficina y además, quedarse fuera del horario de trabajo) es para todos el mismo?
Y si se quedará la directora o la financiera o una administrativa, ¿quien realizaría el mayor esfuerzo? La personas, en general, han valorado más el esfuerzo de la directora.
Ahora, vayamonos a la asociación de amigos de la ciudad (también una organización de personas pero que lo hacen de manera voluntaria) y supongamos que son diez personas y organizadas igual que la oficina (horario en que terminan: las siete). En este caso, las personas han contestado de todo y sin ser ninguno, de los diez, una mayoría representativa: se entiende que cualquiera podía recogerlo y ordenarlo y, además quedarse. Y lo que si se valoraba menos era a los solteros o padres sin hijos ¿¿??
Aunque parezca irracional es de lo más común pero lo que me importa no es ésto.
Donde quiero llegar es que debemos concienciarnos de que tiempo y esfuerzo son dos variables que se deben valorar en su justa mediada, tanto en el ámbito laboral como en el privado.
Por cierto, a tí que estas leyendo estas líneas quiero agradecertelo porque tu tiempo y esfuerzo...lo valen.

viernes, 12 de diciembre de 2008

'Confiencia'

Puede que alguién piense que las cosas no pueden cambiar pero mi experiencia personal me ha enseñado que estamos en un cambio continuo y constante, y por lo tanto que hay que aprovechar dichos cambios y oportunidades para mejorar. Es verdad, tendemos a vivir en una 'zona de comodidad' ('de confort' que llaman algunos) y no queremos salir de ella.
Aún así estamos rodeados de cambios ( el paso del tiempo es el más evidente aunque depende para quién: no es lo mismo para un adolescente que para un anciano). Por tanto, lo racional es asumirlo, pero no es tan fácil para la mayoría de la gente, y aprovechar la experiencia acumulada, también es difícil porque nos puede el subconciente.
En nosotros está tomar conciencia de que no existe vida si no hay conciencia del paso del tiempo y del cambio. Y tomar conciencia de que, a veces, lo más importante que nos ofrece la vida no es la meta que perseguimos, sino lo que encontramos por el camino sin sospechar siquiera que existía.
Lo importante es centrarnos en encontrar y no en buscar, no priorizar en lo que no hay que hacer sino en lo que tenemos que hacer. Y tener confianza en superarnos.
Por ejemplo, te doy la oportunidad de hacer 'flashback' con tu vida, ¿la reconducirías?

martes, 9 de diciembre de 2008

Personas que refrescan

Me gustaría que este blog fuese como un enriquecedor viaje donde lo más importante no son los caminos, las cosas, los lugares que descubrimos sino las personas con las que nos vamos relaccionando.Y para ello tiene que ser un canal de ida y vuelta para quién quiera conectarse a este blog. En el que también cualquier persona pueda plantear sus inquietudes, sus ideas, sus vivencias, libremente.
Antes nos relacionabamos en la escalera, en la calle, en la tienda, en el bar, en las salidas al monte y a la playa,...Yo sigo prefiriendo estos espacios porque no hay nada como una conversación con tu vecino del cuarto, con los amigos del monte; comerte un bocadillo con un trago de vino, de la bota del amigo, después de haber subido al monte; el calor de un beso en la playa...Sin embargo, ahora nos relacionamos por e-mail, mensajes por el móvil, blogs y soy el primero que lo hace.
Entiendo que es otra vía dónde podemos encontrar pensamientos, ideas, reflexiones y a su vez compartir los nuestros. Y sobretodo otro camino para llegar a los demás, mejorar y disfrutar de esta vida.
Aún así la prioridad es la persona que tienes a tu lado en este momento, ¡tú! que lees estás líneas, eres lo más importante y una persona que refresca.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Capacidad para ser

Ha llegado Diciembre y con él los días grises, fríos, lluviosos y con nieve. Se acerca veloz el invierno y también el fin de año. Y es el momento en que muchos hacen el balance del año, de la vida, elaboran una lista de intenciones para el próximo año (dejar de fumar, empezar el gimnasio, visitar más a la familia, un curso de idiomas...) y algunos, los menos, reflexionan acerca de: el legado que quieren dejar, la relación con esa persona tan importante, el proyecto que quiere llevar a cabo y, en definitiva, sobre aquello por lo que merece la pena seguir disfrutando de esta vida.
No creo que sea necesario que la vida tenga que 'despertarnos' con dureza con un hecho inesperado y dramático (perdida de algún organo o miembro, enfermedad grave, fallecimiento de un ser querido...), y que suele suceder cuando mejor estamos, para reflexionar sobre lo verdaderamente importante y obligarnos a cambiar el sentido auténtico de la vida: conseguir nuestros sueños haciendo un ejercicio continuo de eleccciones para que se hagan realidad.
Debemos dejar de pensar en cosas que no aportan nada, de hacer lo que no gusta, de mantener relaciones tóxicas con personas que no hacen más que obstaculizar el camino. Y centrar la energía en las personas y las cosas que nos aportan <> y sobretodo en nosotros mismos que es donde reside la fortaleza, la capacidad de esforzanos, de superación y, en definitiva, la capacidad para SER.
Apuesto a que alguna vez has pensado en todo ésto pero, ¿que harías hoy si superas que sólo te quedan cien días de vida?

martes, 2 de diciembre de 2008

No emocional

Hay una saturación en lo que respecta a la utilización de la aplicación de lo 'emocional' tanto a nivel individual, de grupo como de organizaciones. Intentando solucionar los problemas a base de 'buen rollito', comprensión y afectos, y muchas veces ésto empeora la situación todavía más porque algunas personas se 'lavan las manos', 'no va con ellas', 'dicen: vale , vale',... Y es así porque olvidamos que hay que explicar el problema, cómo afecta a todos los implicados, integrar a éstos en especificar las soluciones y visualizar el nuevo escenario, estimar un tiempo para su relización y, sobretodo el compromiso de todos y cada una de las personas para asumir el reto.
Bien, pero esto es 'emocional'. De acuerdo, ¿y qué falta?.
Falta la parte 'No emocional': disciplina, carácter, firmeza...
Disciplina que emana de quién aspira a que se solucione el problema, lograr el reto o tener éxito. Hábitos y automatismos que se forjan desde los errores y los frascasos que son los que llevan al éxito siempre que tengamos un por qué . Aplicando con firmeza y rigor lo que se ha acordado. Disciplina que tiene que interiorizar cada persona.
Empecemos a movernos cuanto antes para desarrollar también la parte 'No emocional' e integrando ambas lograr que todo sea más sencillo que no fácil.

jueves, 27 de noviembre de 2008

Como una recien nacida

Antes de ayer nació una presiosa niña y hemos ido a verla al hospital justo antes de que cumpliese su primer día. Estaban sus padres y se hablo de si se parece a ella en esto y a él en lo otro, si es tranquila y duerme de un tirón o llora porque demanda alimento, el calor de la madre o es muy activa. Pero lo más destacable es la excelente 'acogida' que ha tenido el bebe por parte del entorno (padres, abuelos, familiares, amigos, conocidos y otros), algo normal como con la mayoría de recien nacidos.
En otra situación bien distinta en los hechos pero de recien nacida ante un nuevo entorno tengo la incorporación, a una nueva empresa, de una competente profesional en su campo como responsable de un departamento y su 'acogida' ha sido como la de un paracaidista que cae en territorio enemigo y tiene que ganarse la supervivencia y además cumplir la misión.
Me consta que muchas empresas no tienen un plan de acogida y en general uno tiene que aclimatarse y adaptarse por su cuenta. ¡Ya claro y que tiene que ver con los bebes! Pues sí, ¿por qué un modelo que tenemos en nuestra experiencia vital (propia o ajena), y tan natural, no lo aplicamos con toda nueva persona que se incorpora a la organización?

El proceso es tan sencillo y eficaz como:
1.- Desear su llegada e informar al entorno de la buena nueva.
2.- Preparar todo lo necesario para los primeros meses y comprometer al entorno.
3.- De quién reporta (madre) y el responsable de personas (padre) son los que deben responsabilizarse siempre de su crecimiento y desarrollo.
4.- Es deseable que algún familiar se convierta en mentor (algún abuelo, tío,...).
El bebe se desarrollará mucho mejor así que en un entorno sin preparar, desestructurado y sin afecto.
Cocretando, tenemos a nuestro alrededor un modelo de actitud y emoción como el nacimiento de un bebe extrapolable y ejemplar para copiar su proceso básico a la incorporación de una nueva persona a nuestras organizaciones. Ahora bien, como con el niño, no puedo aseguraros al 100%que luego no se vuelva un 'cabroncete' pero esa es otra historia que os podría contar bien algún profesor.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Capacidad de compartir

No creo que todos seamos 'iguales', pero sí que ante un objetivo que nos propongamos y que compartamos somos capaces de aunar esfuerzos para lograrlo. Y en este sentido identificarnos con el mismo porque tenemos una meta común.

Pongamos que el 'objetivo' es ir a Salamanca con un grupo de amigos para descubrir la ciudad y sus gentes y compartir la experiencia durante un fin de semana. Primero identificaremos aquellos con los que podemos compartir dicho viaje y quieran ir, no se trata sólo de 'apuntarse' sino de implicarse en su organización y sobre todo de tener claro que libremente se ha optado por compartir el viaje y que tendremos que adaptarnos a los gustos de otros, igual que ellos a los nuestros. Después, toca planificar el viaje y repartir tareas entre los integrantes para organizarlo. Supongamos que hemos decidido ir en autobús y llevar la comida: uno se encargará de buscar dónde dormir, otro comprará los billetes, un tercero comprara la comida para el viaje y así sucesivamente con todo lo necesario e imprescindible para vivir una experiencia que pasará a formar parte de nuestras vidas. Finalmente habrá que verificar que está todo listo, unos días antes de partir, y corregir lo que sea necesario (p ej.: alguien que a última hora no puede ir o que se incorpora más tarde y va en su propio vehículo,...). Y llegado el día, partir con rumbo a esta bonita ciudad y, a: disfrutar de la compañía, del viaje, de la ciudad, de sus gentes,...

Todo esto es fácil cuando se quiere compartir y de nada sirve si uno de los amigos se desentiende de alguna tarea porque después repercutirá en el grupo y la experiencia no será positiva e incluso rompa alguna que otra amistad. Es necesario ceder el protagonismo al grupo y dejar las individualidades a un lado cuando no aporten nada bueno al conjunto.

Es complejo pero no difícil cuando se acepta compartir.

Por cierto, ¡me voy a Salamanca!

jueves, 20 de noviembre de 2008

Calidez y calidad

Hoy he estado en una jornada sobre liderazgo, personas y redes en la que me he encontrado con bastantes personas y me alegra comprobar que cada vez somos más los que queremos mejorar en nuestra profesión y compartir nuestras experiencias con los demás.
Quiero destacar que es importante difundir estos conceptos y más aún ayudar a ponerlos en practica. Podemos pensar que sólo es para las grandes empresas y pymes pero también es aplicable a las microempresas.
Prueba de ello es el trabajo que están haciendo en este campo con el modelo e+d aplicado a pequeños negocios. Nos han mostrado dos casos de éxito: una empresa de telares y una empresa de dulces. Tengo que destacar que la implicación de los gerentes, de los equipos creados y la ilusión con que lo trasmiten son elementos que estoy seguro han contribuido a esta mejorara en sus empresas y de cara a los clientes, empleados y proveedores.
A modo de resumen quiero transmitir una de las ideas aportadas porque nos dicen mucho de cómo relacionarse en el trabajo (por parte de una gerente de éxito con sus empleados): "CALIDEZ en las relaciones personales y CALIDAD en la relación laboral"

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Compañeros de trabajo

Lo habitual es que las relaciones que mantenemos con los compañeros de trabajo no pasen del día a día. Y con las personas que hemos estudiado, practicado deporte o alguna actividad de ocio, sí que solemos mantener contacto, vernos e incluso mantener una relación de amistad.
Cuando hablo de este tema con mis amigos y otras personas que conozco se extrañan que me vea de vez en cuando con compañeros y ex-compañeros de trabajo. E incluso de que con algunos mantenga una relación de amistad.
La pasada semana quede con un ex-compañero, de una empresa donde trabajé, para comer y este Viernes ceno con otros ex-compañeros de otra. Y es lo normal.
Yo le doy prioridad a las personas y fruto de ello son las relaciones que mantengo con muchos compañeros de trabajo. Pero muchas veces la cultura de las empresas no favorece este tipo de relaciones porque estamos ocupados en lo urgente, y en el día a día, para sacar los objetivos adelante. Más bien tenemos un clima laboral dónde prevalece el 'salvese quién pueda'.
¿Por qué con los compañeros de trabajo, con los que nos pasamos tanto tiempo(incluso años), no se mantienen unas relaciones como con los compañeros de estudios, deporte o tiempo libre?