Unos granitos de arena

A veces, me gusta internarme por zonas de mi ciudad que están abandonadas, 'marginadas', e interactuar con sus gentes. Observar, escuchar e incluso mantener conversaciones con quienes percibo que se pueden prestar a ello. Y te llevas sorpresas, sorpresas agradables.
Vivimos cada vez más en nuestro 'mundo', en nuestra zona de 'confort' y, muchas veces, no queremos saber nada de los problemas de la gente cercana y no digamos nada de los 'sin techo', inmigrantes, personas que intentan sobrevivir en nuesto mundo, nuestro propio tercer mundo.

Antiguamente se media el tiempo con relojes de arena, lo que tardaba el grano de arena en caer era la unidad de tiempo. Hoy eso nos vendría bien porque vamos acelerados y apenas dedicamos 'unos granitos de arena' a las cosas que realmente son importantes de la vida: pasear, observar, escuchar, charlar,... Acciones que requieren de los granitos de arena. Personas que necesitan 'unos granitos de arena'.

De esta forma, mi cuota de 'granitos de arena', me encontre en uno de mis paseos con un par de 'medigos' que pedian dinero de una forma curiosa y divertida. Tenian tres zonas: "para cervezas", "para tabaco" y "para porros". Gente con cultura, preparada, que un día tuvo un trabajo bien remunerado, una familia y que lo dejo todo por otra forma de vida, su vida. Porque es su gusto vivir así y probablemente, al menos ese día, estaban más felices que muchos de los que pasaban de largo.
Ellos me dieron su sonrisa, me hicieron reir y me alegraron el día.

No se debe generalizar porque mucha gente no ha llegado a estas situaciones por voluntad sin embargo no quita para dedicarles, al menos, ayuda, nuestro granito de ayuda.

El tercer mundo lo tenemos al lado. Pronto se acercan fechas únicas...está en tu mano.


Gracias por dedicarme 'unos granitos de arena'